Hay algunas opiniones de administradores sobre el gobierno corporativo al respecto de que éste sólo burocratiza la empresa y hace más pesada la carga administrativa y reduce el margen de maniobra de la organización, además de que solo aplicable para empresas que facturan miles de millones al año, es decir, no es necesario en empresas medianas o pequeñas ni en empresas de tipo familiar.
Una realidad es que la razón de ser de la empresa es el motor que lo acerca a su visión. Y no hay mejor instrumento para asegurar el tránsito hacia la visión que el gobierno corporativo. Y no es una opinión, lo confirman las estadísticas.
Menos del 30% de las empresas familiares avanzan con éxito a la segunda generación y sólo el 12% alcanza la tercera.
El Gobierno Corporativo en la Empresa Familiar es de suma importancia para la trascendencia del negocio. Proporciona certidumbre en el largo plazo.
Aquí es necesario eliminar algunos mitos respecto al Gobierno Corporativo en la Empresa Familiar y quizá el más importante es el que se refiere al tamaño de la Empresa Familiar. En mi experiencia he comprobado que la transición de la empresa familiar a una empresa con un Gobierno Corporativo funcional no es un proceso limitativo a un período fiscal o un tramo en el tiempo del desarrollo de la empresa. El éxito está más en la madurez, la visión y la formación de los fundadores y no en el tamaño de la empresa; el gobierno corporativo no es un ente innominado, no es un cargo adicional especial en la empresa….el gobierno corporativo es una forma de gobernar o administrar una empresa cuya cultura de la transparencia y rendición de cuentas, permea desde los dueños o socios, hasta los puestos operativos de menor jerarquía…se trata de incorporar las mejores prácticas adaptándolas a las necesidades y tamaño de la institución.
Si el fundador tiene muy clara su posición frente los riesgos patrimoniales en cualquier punto del crecimiento de su empresa, si es consciente del poder que ejerce en el destino de su empresa tanto en el tiempo presente como en la influencia hacia el futuro, es muy probable que alcance una transformación exitosa.
Para ello existen diversas metodologías que de uno forma u otra tienen por objetivo instrumentar la ejecución de plan de acción para la implementación de estas mejores prácticas en la empresa, sin embargo, previo a la elección de un equipo o grupo de consultores multidisciplinario que se haga cargo de este importante plan, se tienen diversas formas de abordar su implementación desde la forma más sencilla o básica – pero eficiente- hasta la mayor dificultad que se requiera. No pretendo en este texto explicar estas metodologías. Pero si compartir el punto de partida.
Desde nuestra perspectiva, ya sea el consejo de administración, el dueño o dueños y la dirección general, es requisito indispensable, reconocer que la empresa es un ente económico vivo. Que está sujeta a un conjunto de normas, reglamentos y leyes que permiten ejecutar su propósito económico, social, ambiental y humano.
Partir de lo anterior nos da un panorama cierto para ubicar la posición del patrimonio del dueño, de la empresa y de las fuentes que lo incrementan.
En la perspectiva mundial los gobiernos cada vez están más atentos a prestar atención a la acumulación de grandes capitales y las aplicaciones tributarias en la transmisión del patrimonio de una generación a otra. México no es la excepción.
Finalmente y a modo de conclusión de mis comentarios respecto al Gobierno Corporativo, el marco normativo actual contempla algunas figuras que pueden ser útiles para lograr una planificación de la transmisión del patrimonio, tales como los acuerdos familiares, el testamento, la copropiedad, el fideicomiso, la sucesión testamentaria y la holding, por mencionar algunas. Sin embargo, no hay que evitar la visión simplista de iniciar un trámite jurídico.
La planificación patrimonial forma parte del Gobierno Corporativo. Para lograr una transformación exitosa de la empresa familiar es necesario aplicar criterios en diversas disciplinas como las fiscales, financieras, jurídicas, laborales, administrativas, tecnológicas y de auditoría, es decir, es una tarea multidisciplinaria. Todo lo anterior enmarcado en una Agenda Directiva que lo haga posible.
Enrique Pérez Zapata